lunes, 29 de junio de 2009

¡Que gozada pedalear de noche!

Y es que con los "calores", salir a otra hora que no sea las 7 u 8 de la noche.... Por ello, decidí estrenar mis salidas nocturnas. Así, de paso, entreno la vista para la nocturna. ¡Y tanto que la preparé! Es que se me ocurrió ponerme las gafas normales de sol para las salidas diurnas y....¡a las 9 se me hizo de noche y eso que no era de noche!

Bueno, la verdad miento un poco. El jueves ya hice un pequeño amago de salida nocturna, pero el encontrarme con Albert y César en los containers de Can Cuiàs, cuando solo llevaba una hora y cuarto de pedaleo, dió al traste con la salida. Y es que mis dos buenos amigos (uno ciclista y otro gran atleta, con varias maratones en su haber) ya estaban de regreso a casa, tras haberse "marcado" un Mortirolo, y decidí acompañarles ya que había muchas cosas que contarnos. ¡Un abrazo a los dos, desde aquí!

Como decía, dicho jueves salí e hice una salida corta de 21 km, en poco menos de hora y media. Pero, ¿que no sale nadie más? ¡Cuñao y Agus, que os he "pillao" bajando Can Buxeres! Eso sí, poco pudieron hacer, ya que, a la suma de un pinchazo de Cuñao, nada más salir, se unió el hecho de que empezó a chispear, y prefirieron darse la vuelta. ¡Pero os vino bien, bribones, ya que sé que, luego, os pusísteis "morados" de cerveza! Yo, por mi parte, a pesar de que iba chispeando, decido seguir y que sea lo que Dios quiera. Ya en Can Clota, me encuentro con Carlos Prieto y su mujer, que regresaban escapando de la lluvia (Carlos me comentaba que venían de Sant Medir y estaba cayendo "la del pulpo") e intentan "echarme abajo (de buen rollo, claro)" la salida. Ante ello, lógicamente, decido quedarme en la Vall de Sant Just y no ir hacia Can Borrell, que era mi idea. Por suerte, dejó de llover e hice una salida corta que me vino fenomenal y más tras saludar a varios amigos.

Ayer, fue diferente. Sé que Jordi y Toni salieron, aunque no sé datos ni ruta. Aparte Xavi y Emili, que sabía que no salían, no sé nada de los demás. ¿Vendréis a la nocturna? ¡Estoy intrigado! Yo, por mi parte, tuve que salir por la noche, ya que el sábado tuve boda y....¡como siempre, acabó muy tarde! Mi recorrido, que inicié a las 19:30h, fue: RENFE-Can Buxeres-Les Planes-Carretera Esplugues-Institut Sant Just-Can Carbonell-Can Fatjó-Containers Can Cuiàs-Coll de les Torres-Containers Can Pasqual-Turó de Can Pasqual-Can Castellví (casa rosa)-Font de Can Castellví-Can Llevallol-Containers Can Cuiàs-Pista de L'Espinagosa-Vallvidrera-Tibidabo-Escola Judicial-Trialera de las raíces-Carretera de les Aigües-Plaça Mireia-Can Clota-RENFE. En total 36,4 km a 16,8 km/h y 1.004 metros de desnivel positivo acumulado.




Poco novedosa la ruta, salvo el hecho de empalmar la subida de Can Fatjó con la subida hasta el mismo Turó de Can Pasqual. Tenemos que probarla algún día a fuerte ritmo. Es de las que dejan huella......¡en los cuádriceps y gemelos!...¡y en la moral de más de uno! Menos mal que, al menos, la fuerte humedad que había a las 19:30h, desapareció media hora después y el resto de salida fue con temperatura fresca. ¡Fenomenal!

La bajada desde el Turó de Can Pasqual fue accidentada ya que, evitando un "bttero" que iba sin luces y vestido rigurosamente de negro (¡manda huevos, de noche!), me salí de la pista y tuve un pequeño revolcón sin importancia y, tras ello, decidí relajarme un poco y, siguiendo con el esclarecimiento de los sitios por donde pasamos y para "culturilla" de la Penya, visito la Font de Can Castellví, ya remozada del todo.



¡Más "culturilla"! Nuevo letrero en la Font de Can Castellví, en la foto de arriba. Abajo, Alberto de la Font de Can Castellví

De ahí, bajando los "okupas" al revés, temo encontrarme las obras de la nueva residencia canina y....¡no encuentro rastro alguno de ellas! Me voy a Vallvidrera y subo por carretera hasta el Tibidabo, lleno a rebosar de coches y, para terminar la "relajación", tomo carretera de les Aigües, pensando que, al ser más de las nueve de la noche, no me encontraré a nadie. ¡Craso error! Yo creo que a esa hora, al menos en verano, va a pasear, hacer "footing" o ir en bici, media Barcelona. ¡Qué horror! No pude ponerme a 30 km/h ni un solo momento. Llegada a Plaça Mireia, repleta de gente cenando en el merendero y bajada hasta casa. Me encuentro a Cuñao en la Rambla y charlamos un poco. Espero que el médico te lo haya puesto bien, campeón, y puedas seguir con la bici.

A los demás, espero veros en la nocturna. Recuerdo que se sale a las 21:00h desde RENFE, recogiendo al resto por el camino y que la cena será a las 22:30h. ¡Nocturnaaaaaaaa!

lunes, 22 de junio de 2009

El verdadero Matamachos

Sin duda. Ya me había hablado Xavi de él y de su rampa final al 32%. Pero, ya se sabe, hasta que no lo ves no lo crees. Y mis compañeros de salida de ayer, después de la paliza que me habían dado, decidieron "rematarme" con semejante "monstruo".


Ayer, domingo, salimos poca gente. ¿Qué pasa, compañeros? ¡Si hasta en invierno salíamos más! No sé si es la hora de salida o que el verano nos va "chafando" cada vez más, a medida que cumplimos años o.... El caso es que cinco componentes de la Penya madrugamos a las 7:15h para hacer nuestra ruta. En vista de que ni Carlos ni Emili estaban presentes....¡imaginaos a quién le tocó el jefe de ruta! Ese mismo.....


El recorrido tuvo un par de novedades que hace tiempo que quería enseñaros y que, fundamentalmente, no se hacían por estar en la otra punta de nuestra Collserola: el sendero de la Font de Santa Eulàlia y la trialera del Turó d'en Segarra, aunque, éste último, desde la mitad del mismo. Completa, la ruta fue: RENFE-Can Clota-Carretera de Esplugues-Rambla Sant Just-Institut Sant Just-Poni Sant Just-Sendero del abocador-Pista de Can Carbonell-Tenis Sant Gervasi-Carretera Molins-Containers Can Cuiàs-Pista de L'Espinagosa-Carretera del Tibidabo-Vista Rica-Turó de Santa Maria-Carretera de les Aigües (2º tramo)-Trialera de Casa Juaco-Turó d'en Fotjà-Sendero de badenes de la Pista del Forat del Vent-Coll de la Ventosa-Sendero de la Font de Santa Eulàlia-Trialera del Turó d'en Segarra-Can Masdeu-Lazareto-Puente de la Ventosa-Forat del Vent-Carretera Arrabassada-Carretera de les Aigües (2º tramo)-Turó de la Magarola-Vista Rica-Carretera de Sant Cugat-Carretera de les Aigües-El verdadero Matamachos-Carretera de les Aigües-Plaça Mireia-Can Clota-RENFE. En total 46,7 Km en 2h 45' a ¡¡17 Km/h!! y 1.105 metros de desnivel positivo acumulado. Y esos fueron los número de Tomás y mío. ¡Imaginaos la media de Toni y no digamos la de Jordi! ¡Un palizón que me dieron los "máquinas"!


Desde la estación, salimos Andrés, Alberto, Tomás y Toni. Yo, al menos, tras los saludos, me quedé un poco tranquilo. Llevaba casi un mes, desde el Cabrerès, sin coger la "cabra" (sólo había salido, con la de carretera, el martes pasado) y estaba "acongojado" ante el nivel que estaban cogiendo los "machos alfa" de la Penya. Y hoy, venían dos de ellos. Pero Tomás y Toni decían: "Hoy, tranquilitos" y Andrés, al igual que yo, soplábamos de alivio.


Estábamos subiendo Can Clota, cuando, de repente, y de no sé dónde....¡¡aparece Jordi!! Fue verlo y a Toni le dió un "subidón". Andrés y yo nos mirábamos, pensando: "Se acabó la fiesta". No sé que se toman, ni lo que entrenan, ni....¡qué se yo! Pero, fue aparecer la "máquina de matar beteteros" y desaparecer la calma. ¡No sé qué habría pasado si hubiesen venido todos, con Ramonet a la cabeza! El caso es que, a partir de ese momento, el ritmo fue otro y no precisamente de paseo.


Para calentar un poco y, visto que Tomás quería un poco de "novedad" en la ruta, nos metimos por el sendero del Poni de Sant Just, cerca de Can Pedrosa, y así "frenar" un poco a los "bestias pardas". Pero, ya metidos en materia (o sea, ya en la pista de Can Carbonell para subir por el Tenis), Jordi, en 100 metros, nos sacó 50 y, claro, Toni detrás de él. Tomás, Andrés y yo seguíamos en un segundo plano ya que, a fecha de hoy, es imposible seguir semejante ritmo. ¡Jordi se pasó toda la salida subiendo y bajando a buscarnos y eso que nuestro ritmo no era "moco de pavo"! ¡Yo creo que debes fichar ya por un equipo profesional, compañero!


Llegamos a los containers de Can Cuiàs y, cuando Andrés y Tomás se reagruparon con nosotros, nos dirigimos a la pista de la Espinagosa y, encontrándome mejor después de calentar, decido darle marcha al asunto. 16 por hora, 17, 18, 19. ¡Vaya, veo que no me pasan! Diviso la cadena y, por la derecha, a más de 20 km/h, ¡Jordi, silbando! ¡Esto sí que es humillante! Y Toni, detrás a mi rueda. ¡Tremendo! Me dí el calentón del día y, claro, la subida al Tibidabo la tuve que hacer regulando y maldiciendo el momento en que quise darme un "baño de gloria". A partir de entonces, decidí ser "modosito" y quedarme en lo que soy: un "medio macho alfa" y ya te vale.


Andrés, no sé si porque era la hora o por el ritmo que llevábamos, en el cruce de Vallvidrera hacia el Tibidabo, decide regresar. ¡Me dejaste "colgado" con semejante compañía! ¡Esto no te lo perdono!


Bajamos la carretera e hicimos el sendero de las raíces, antes de llegar a Vista Rica y, casi sin continuidad, iniciamos la subida de 800 metros al 9,1% del Turó de Santa Maria, rezando para que no me dejasen ya, definitivamente, abandonado. Pero, sorprendentemente, siguieron a mi lado y pudimos hacer juntos la subida, aunque, claro está, a falta de unos 50 metros, se lanzaron a "coronar" con su ritmo. ¡Me parece que voy a cambiar mis entrenos y a hacer más "spinnings"! ¡Xavi, prepárate, que te voy a quitar el sitio en la clase, ya que tendré que motivarme de alguna manera! ¡Gracias de antemano, compañero!


En carretera de les Aigües -en la zona del Velódromo de Horta- nos encontramos un amigo de Tomás, de la penya de Bike Esplugues -no recuerdo ahora su nombre, un saludo desde aquí, si nos lees- y, no sé cómo, Tomás le engaña para que nos acompañe. ¡Si llega a saber con quién se mete, seguro que no lo hace! Al menos, a mí, me vino de maravilla tener alguien detrás para no decidir dejar la bici inmediatamente.


Nos fuimos a la trialera de Casa Juaco. A mí me cuesta un poco bajarla, pero estos "máquinas" les da igual subir que bajar. La bajaron como si estuviesen dando un paseo. ¡Sí, me estoy planteando dejar la bici, sí! Luego, tras hacer un pequeño tramo de la carretera de la Arrabassada, les metí por el sendero de los badenes, paralelo a la pista de Can Ferrer al Forat del Vent. Al ir yo delante, les frenaba un poquito -ya se sabe, la edad, los reflejos...-, aunque Tomás se lo pasó en grande haciendo algún salto que otro. ¡Prometo, el próximo día, apartarme un poco para que lo disfrutéis mejor!


Bajamos hacia el Coll de la Ventosa e hicimos lo más divertido del día: el sendero de Santa Eulàlia, bastante fácil, con algún tramo de subida y, luego, la trialera del Turó d'en Segarra. Tomás "alucinaba pepinillos". ¡El tío se quería "tirar" por un barranco a la izquierda de la trialera! Allí, recuerdo hace casi cinco años, mi amigo Pablo -¡qué te cuentas, triatleta! ¿Preparando la IM de Hawaï, eh? ¡Un abrazo desde aquí!- se lanzó. Yo, detrás de él, con la bici a cuestas y bajando escalones naturales. Al cabo de dos minutos, vuelta de campana: no sé como sigue vivo. El caso es que hago desistir a Tomás -aunque las dos trialeras convergen luego en el mismo sitio- y bajamos por la trialera original. Yo, a los cincuenta metros, ya no los veo. ¡Cómo baja esta Penya y eso que la trialera se las trae, con un par de "trampas" y piedras por todas partes!


Nos reunimos y hacemos la subida de Can Masdeu y el Lazareto para regresar a la Ventosa. Subimos Toni, Jordi y yo juntos, con Tomás con su amigo unos metros detrás. Pero, fue pasar el falso llano del Lazareto y....¡Jordi y Toni, adiós! El ritmo es infernal y decido esperar a Tomás, al que veo que, poco a poco, va dejando a su amigo. Llegamos él y yo juntos, delante de Jordi. ¿Delante de Jordi? ¡Sí, que pasa, no tenemos la culpa de que baje a buscarnos dos veces y en la segunda lleguemos antes que él! Ahí ya no me puedo resistir y he decidido enviarle a casa a los inspectores de la UCI. ¡Ese ritmo es imposible!


Allí, ya decidimos regresar. Forat del Vent y carretera de les Aigúes, para enlazar con el Turó de la Magarola, en cuya bajada final nos hicimos las fotos del día






De arriba a abajo: Alberto, el amigo de Tomás, Jordi, Tomás y Toni bajando la Magarola


Después de llegar a Vista Rica, comento bajar por Vallvidrera y dar por finalizado el "tormento". Pero los "máquinas" son insaciables: "Alberto, vamos por carretera de les Aigües y te enseñamos el tramo del 32%". ¡Ostras, pero si estoy medio muerto! A todo ello, el amigo de Tomás ya se había despedido y me aguardaba el suplicio. Bajamos por los Vivers de Can Borni -¡tened cuidado, compañeros, si váis por allí! Han puesto grava para que suban los camiones a la obra y, en uno de esos "charcos de grava" patiné a lo Jorge Lorenzo, saqué un pie de la cala y, no sé como, no me fui al suelo- y por la trialera de las raíces, que disfruté un montón ya que, por fin, tengo la suspensión delantera en condiciones.


Reunión al final de la trialera. ¿Y ahora qué? Vamos reagrupados y, a unos 25-28 km/h, vamos reservando fuerzas para la subida del 32% (¡reservando ellos, quería decir!). Dicha subida está situada en la urbanización cercana a la Torre de Collserola y se inicia al lado de los containers de la misma. Nos adentramos. Al principio, es una cuesta dura, entre el 18 y el 20%, que, al estar asfaltada, no presenta más dificultad que la del estado de forma de cada uno. Pero, en ese momento, pasados unos 15o metros, levantas la cabeza: ¿Pero qué es esto? El asfalto está estriado -lógico, si no, no sube un vehículo ni de coña- y, unos 50 metros más adelante, se empina de manera colosal. Delante, Jordi empieza a retorcerse y los demás ya hemos puesto el plato pequeño. Menos mal que sabemos que Jordi va con el ¡¡¡plato mediano!!!, que sino, al menos yo, pongo pie a tierra. Tengo a Toni delante dándome referencias y, cuando empezamos dicha rampa final de unos 50-60 metros, lo pongo todo, echo todo el cuerpo hacia adelante, el culo en la punta del sillín y fijo la vista en el suelo. ¡Que sea lo que Dios quiera! La respiración, ni os cuento. Las pulsaciones, a tope. En un momento, antes de la curva a la izquierda, caracoleo. Pero sigo. Delante, ya casi a punto de llegar, Toni pone pie al suelo y le paso por la izquierda. No sé que le pasó a Toni, pero no se lo pregunté porque yo no podía ni hablar (de hecho, estuve un par de minutos sin poder hacerlo). A todo eso, Jordi estaba hablándonos, pero no sé de qué. Ni le oíamos. Desde luego, queda bautizado como el verdadero Matamachos. ¡Tenías razón Xavi, corto pero muy intenso!


Bajamos hacia la carretera de las Aigües. ¡Ya está, relax y a casa! ¡¡Noooo!! Jordi y Toni empiezan a meter plato. Vamos a tope. No puedo más. Miro el GPS: ¡¡35 km/h!! Levanto el pie. Aún así, voy a 30 km/h, pero acabo pagándolo en el tramo de subida final antes del puente de madera y Tomás me alcanza y me pasa. Cuando llego a la Plaça Mireia, allí están los tres como si nada. José Luis: ¿me puedo dar de alta en la Peña Camarón?


Bromas aparte, gran salida con una temperatura muy agradable y contento porque les gustasen los tramos nuevos a los compañeros. Una vez llegado al Depor, tremendo almuerzo -los bocatas del Depor vuelven a ser lo que eran- con Agus y Cuñao, que habían salido a las 7h y se habían marcado un par de Mortirolos -el "oficial" y el Turó d'en Puig-, eso sí, tranquilos. Me alegro, Cuñao, que, poco a poco, vayas cogiendo otra vez las ganas de pedalear y, lo más importante, sea la ruta que sea, son estos almuerzos y ¡¡¡ese vino de Gandesa del que sólo me dejásteis un culín, bribones!!! También nos acompañó Rosendo. ¡Menos mal que no viniste, campeón, si no, entre los cuatro, acabáis conmigo!


Y, luego,.....¡a la playa! No hubo nada mejor para recuperarse del palizón que un bañito en agua salada.

Y, por otra parte, ya está aquí la Nocturna. Será el día 4 de julio y, en principio, reservaré a las 22:30h. Decidme en los comentarios que os parece. La idea sería salir a las 21:00h desde RENFE, para recoger a los "espluguenses" a las 21:15h y meternos en el Parc a las 21:20h. Sería una hora y pico, con media hora de noche para hacer fotos y demás. La ruta tendría como final, como cada año, la bajada del Mortirolo para ir hacia La Salut. El resto de la misma ya lo hablaremos o bien vía comentarios o el mismo día de la salida. Ya diréis. ¡Id preparando luces, paravientos, bandas refractantes y...buen humor! ¡Ah, y el estómago preparado!

lunes, 15 de junio de 2009

¿Mortirolo 2? ¡No, la Siberia!

Mejor así. Al final, tanto Mortirolo nos lía demasiado y es mejor poner las cosas por su nombre. O sea que, a petición de Jorge, que me ha enviado el resumen de la salida de ayer, la subida de la Font Furriola, que llamábamos Mortirolo 2 y que llega desde la Rierada hasta el km 4 de la carretera de Molins a Vallvidrera, se llamará la subida de la Siberia.

Ya había oído, amigo Jorge, ese nombre alguna vez y lo había visto en algún "blog" y es el que usan por la zona, como tú bien dices, ya que empieza cerca de la calle Siberia de la zona de Can Castellví. ¡Ya sabéis, Penya, la Siberia!
La salida estuvo compuesta por Jorge, Paco Lapierre, Emili, José Luis, Antonio y Toni (¿dónde estaban los "máquinas"?) e hicieron unos 40 km con unos 1.000 metros de desnivel positivo acumulado.

La ruta la preparó Jorge. Primero entraron, tras hacer carretera de Esplugues y la Rambla de Sant Just, por Can Gelabert para, tras hacer el bosquecillo largo, pasar por La Salut, hacer la subida de Can Marc y, tras cruzar la carretera hacia la cementera, ir dirección a Castellciuró. Tras hacer la pista de subida tras Can Amigó del Clot, hicieron la bañera del Cuñao, pasando por la masía de Can Bofill.

Una vez en la pista de Castellciuró a Santa Creu d'Olorda, Jorge decide ir hacia Sant Bartomeu de la Quadra, pero, en vez de ir hacia allí por la pista principal decide "equivocarse" y se mete en una trialera desconocida y....¡claro, Jorge, improvisar tiene estas cosas, compañero! El caso es que la dichosa trialera se complica y acaban todos con la bici a cuestas. ¡Me imagino a José Luis diciendo de todo al bueno de Jorge! De todo menos amigo, je, je.
Cuando acaban la trialera se encuentran un barranco y, yendo campo a través, se topan con dos hombres que estaban segando un huerto. ¡Debieron alucinar pepinillos con vosotros! De todas maneras, aparte de un servidor, sé de otro componente de la Penya (o sea, nuestro Andrés) que habría disfrutado con ello. ¡Investigar cosas nuevas, de vez en cuando, está bien y, con buen humor, hasta lo disfrutas!
En fin, continuando con la crónica de Jorge, a la postre, logran encontrar la carretera de Molins y, tras subir a Sant Bartomeu, bajaron hacia Can Castellví (¡qué recuerdos tras las salidas de la Rierada de hace años! ¡Por cierto, no hemos hecho la salida a la Rierada de este año! Iré a investigar a ver si ya han despejado los árboles que lo impiden) y se dirigieron al puente de la Rierada para hacer el Mortirolo 2, ¡uy, perdón, la subida de la Siberia! Y, tras las fotos de rigor, subida a buen ritmo hasta la carretera, trialera fácil de la central eléctrica de Santa Creu y, a buen ritmo, hasta los containers de Can Pasqual, bajada hasta los containers de Can Cuiàs, pista de la Espinagosa, Turó d'en Cors y, por supuesto, ¡magnífico almuerzo en Plaça Mireia! Me imagino que merecido ya que la ruta era realmente dura y, el calor apretó de lo lindo.

José Luis, Emili, Jorge, Antonio, Paco Lapierre y Toni en el puente de la Rierada antes de iniciar la subida de la Siberia (ex-Mortirolo 2)



En la parte final de la subida de la Siberia

Cambiando de tema, parece que el día 4 de julio gana por goleada para la nocturna. Dejaré pasar una semana más para las votaciones de los que faltan y haré el lunes que viene, si os parece bien, la reserva definitiva. ¡Animo y apuntaos los que faltáis! ¿Os váis a perder imágenes como ésta?


Nocturna 2.007


Nocturna 2.008



Nocturna 2.006





lunes, 8 de junio de 2009

Los "machos alfa"

....Y la "Peña Camarón" o los de un "Piñón x Debajo". ¡Me estáis estresando con tanto nombrecito! ¿No es mejor equipo A, equipo B, etc, como toda la vida? Y, como uno va cumpliendo años, no es cuestión de trabajar demasiado el cerebro. Con el A, B y C de toda la vida, seguro que me acuerdo.

El caso es que, cachondeo aparte, y entre las edades de unos y otros, entre el nivel de unos y otros y entre la disponibilidad de entrenamiento de unos y otros, la Penya tiene diferentes niveles aunque, eso sí, y a pesar de algún que otro roce inevitable entre tantos componentes, siempre con el "buen rollo" caracterizando -o al menos intentándolo- al grupo desde el primer día, aunque no siempre se consigue.

Por ello, hoy toca crónica de los "machos alfa" por cortesía de Andrés. Y es que ¡vaya grupo salió ayer y menos mal que yo no fui -esta vez me tocó carrera a patita por Cornellà: la Cursa de 10 Km de Can Mercader-! Solo hay que mirar la lista de componentes de la Penya que se dedicaron a "machacarse" los unos a los otros: Ramón, Toni, Rosendo, Paco Lapierre, Andrés, Paco, Jorge, Carlos y un amigo de Toni -Andrés no se acuerda de su nombre: ¡te haces viejo, compañero!-

Carlos, Rosendo, Toni, Ramón, Paco, Jorge, amigo de Toni y Paco "El despechugao" Lapierre en la cima del Turó d'Olorda (Andrés estaba haciendo la foto)

La ruta, durísima. ¡Hombre, caniguenses! ¿Cómo se os ocurre meterle esa ruta al amigo de Toni? ¡No va a volver nunca más! Parece la tónica nuestra: cada vez que viene un "novato", tenemos que demostrar lo "machos alfa" que somos, je, je. El caso es que, además del calor que debió apretar de lo lindo, el amigo de Toni lo tuvo que pasar francamente mal. La ruta fue: RENFE-Carretera Esplugues-Institut Sant Just-Can Gelabert-Inicio subida Penya Moro-Trialera del bosquecillo-La Salut-Mortirolo hacia Santa Creu-Pista asfaltada Santa Creu-Sendero del Gran Cañón-Creu d'Olorda-Merendero Santa Creu-Trialera de la central eléctrica-Containers de Can Pasqual-Casa rosa-Bajada parte fácil Can Balasc-Subida dura de Can Balasc-Casa rosa-Containers Can Cuiàs-Turó d'en Cors-Matamachos Sant Pere Màrtir-Plaça Mireia-Can Clota-RENFE. Por una ruta similar que hice un día, son unos 34 Km con 910 metros de desnivel positivo acumulado (Corregídme, compañeros, si os dan otros datos).

Es una ruta que conocemos mucho, aunque hacía mucho tiempo que no la hacíamos, sobre todo el camino de subida a la Creu por el Gran Cañón y la subida dura de Can Balasc -creo que la última vez que la hice fue hace unos tres años, cuando Miguel Arjona -amigo de José Luis y componente del grupo OBK- hizo esa subida con nosotros y conseguí llegar -eso sí, ¡absolutamente muerto!- junto a él. Por supuesto, después de eso ya no salió más con nosotros.....Si nosotros somos "machos alfa", ¡imaginaos semejante "máquina" del pedaleo! (hace poco se hizo Terra de Remences, en bici de carretera, en menos de cinco horas y media, y eso que son más de 180 kilómetros y más de 2.000 metros de desnivel positivo acumulado. ¡Bestial!).

El caso es que, imaginando la marcheta que debería poner Ramón, la salida debió ser a tope y, claro, subiendo Can Balasc, con su par de rampas al 19 y 21%, respectivamente, el amigo de Toni se cargó la cadena. Andrés me comenta que el ritmo fue infernal y que, ya llegando al matamachos, él y Paco Lapierre optaron por irse a casa, dejando a los "machos alfa" con semejante reto, después de la tremenda paliza. No sé quién subiría junto a los "maquinas", pero ya temo volver a coger la "cabra" (que, por cierto, está en el taller ya que la suspensión delantera que me fallaba en el Cabrerès está rota. ¡A ver cuando la tendré...!). Imagino que, al amigo de Toni le pagaríais unas "cervecitas" en el Depor después de tener que "aguantaros" durante toda la mañana, ¿no?

Por otra parte, recordar dos cosas. Primero: el día 21 de junio se hace la Gósol-Berga, a la que no podré ir finalmente, aunque animo a los que me preguntásteis por ella a que os apuntéis. Pedalada dura al principio con dos puertos: el de Gósol y el del Padró, para, luego, hacer grandes bajadas, rematadas al final por varios kilómetros por los senderos de la Espunyola, realmente magníficos para hacer técnica y, además, rápidos.

La segunda cuestión es la nocturna. ¡Hay que empezar a prepararla! Empecemos votando por el día o días en los que podáis hacerla y si os interesa más en viernes o sábado y a la hora de salida. Por supuesto, el objetivo no es pedalear -aunque ¡algo haremos!- sino cazar jabalíes, tomarnos unas viandas y unos buenos vinos, como cada año, en la Ermita de La Salut, rodeados de buen ambiente....¡nocturno, claro está!

miércoles, 3 de junio de 2009

Resaca del Cabrerès

¡Y parece que dura! ¿Qué pasa, caniguenses, que no os contáis nada? Parece que el fin de curso de los niños o el calor o la astenia primaveral o......¡yo que sé! O, igual, nos estamos desconectando de la BTT o del "blog".

No sé nada de la salida del domingo. Creo se salió con Xavi de jefe de rutas, no sé más ya que no pude salir por temas laborales.

En fin, ya que nadie explica nada....¡pues explico mi salida del viernes! Aunque, claro, no fue de BTT. El caso es que estaba pensando que hacer y me dije: "creo que no tengo codonyat en casa....¡pues me voy a las paradetas de la Abadía de Montserrat y lo compro!". Y así fue.


La bici que pasa a mejor vida en el Aeri de Montserrat: una Peugeot de cambio de cuadro de 12 velocidades, 42 de plato pequeño y ¡¡25 años de vida!! ¡Adiós, compañera!

Salí de casa para darle mi último homenaje a la Peugeot de carretera de casi 11 kilos que tengo en casa -me despido de ella, ya que me compro una Trek Madone, para ir alternando con la "cabra"- y, por supuesto y más teniendo tiempo, me lanzo a subir Montserrat. El recorrido fue Hospitalet-Sant Just-Sant Feliu-Molins de Rei-Pallejà-Martorell-Olesa por la carretera de las carpas-Monistrol-Monasterio de Montserrat y regreso, pero, en vez de pasar por Molins, me desvié por Sant Joan Despí y Cornellà, para llegar en llano. Total de 109 Km a 25,6 Km/h y 1.330 metros de desnivel positivo acumulado.



Parece mucho y, aunque realmente lo es, cualquiera de la Penya podría hacerlo y espero que los propietarios de alguna de carretera la hagamos algún día. Eso sí, los 8 km de subida al Monasterio al 8,8% de media y, subiendo con un 42 de plato, se me hicieron eternos, sobretodo la rampa de 500 metros al 11% ya llegando a la zona del parking.



En Olesa, con Montserrat al fondo




Impresionante vista de Monistrol desde el Km 5 de la subida al Monestir
Eso sí, la compensación de la subida con las increíbles vistas de Monistrol, según vas subiendo y, el hecho de coronar Montserrat con la "ferralla" que llevaba fue bestial.

Mi Peugeot, despidiéndose de la Abadía

Y una vez comprado el codonyat (¡eh, que es en serio que lo compré!), bajada tremenda y muy guapa. No recordaba lo bien que se baja con una bici de rueda grande. Un par de rectas a 60 Km/h y el par de herraduras finales, antes del cruce con la C-17, fueron gratificantes.

Lo que ya no fue tan gratificante fueron los ¡¡cuatro!! pinchazos que tuve. Menos mal que el último ya fue en Cornellà y pude llegar a casa, eso sí, derrapando y a punto de desllantar en más de una ocasión, pero es que, además de las cámaras de repuesto, acabé con los parches.

En fin, ya os he contado y quitado las telarañas al "blog". ¿Qué os contáis los demás? Yo, este domingo, tampoco os podré ver, pero, al menos, seguiré poniendo algún "post", aunque tenga que hablar de moda o de biquinis....