¡Que rasca en el Tibidabo!

Hoy la crónica -sin fotos, sin perfil (lo pondré mañana) y saliendo a las 8:00h, ya que el tiempo obligaba- será como la salida: corta.

Aunque, eso sí, como siempre, con buen ambiente, pero con frío. La ropa que llevábamos nos delataba, sin duda. Doble capa -¡como mandan los cánones de don Andrés! ¡Te hemos hecho caso, sin duda!- y, dichas capas, consistentes. Ya Xavi y alguno más hablaba de "sacar del armario" -¡ojo, a ver qué sale del armario!- la ropa de invierno y esas zapatillas milagrosas que todo lo "calientan" y que, sin duda, al menos yo, van a "caer" al poco que haga más frío.

Hoy hemos salido con la "cabra": Rosendo -con un "pedazo" de bici: la Cannodale Scalpel, con suspensión trasera integrada en el cuadro. ¡Gran máquina, sí, señor!-, Xavi, Alberto, Antonio, Jordi, Paco Lapierre, Joan, Paco (un amigo de Jordi) y ¡don Albert Viella! Por mi parte, Albert, ya lo sabes y te lo dije un día: ¡sigues siendo miembro de esta Penya y, al menos hoy, me alegro mucho de tu "regreso"! Aunque nos veamos intermitentemente, sé que has vuelto a coger el "gusanillo" por pedalear y te espero ver más veces. Eso sí, hasta que cojas la forma, ¡te "chulearé" un poco! ¡De algo me tengo que "vengar" de la época en que era imposible ir por delante tuyo!

La ruta me ha tocado. Y ha sido ésta: RENFE-Carretera Esplugues-Institut Sant Just-Can Carbonell-Subida dura de Can Fatjó (en línea recta)-Containers Can Cuiàs-Pista de la Espinagosa-Vallvidrera-Trailera de subida de la torre de Collserola-Tibidabo-Carretera Arrabassada-Sendero de subida de Can Cortès al Coll de la Vinassa (bancos verdes)-Trialera de Andrés-Centro Información-Sendero del merendero de Santa Maria de Vallvidrera-Subida al Pantà por las escaleras-Font de Cinto Verdaguer-Subida a Mas Sauró-Trialera de María José (¡¡hoy la hemos visto, por fin!! ¡¡Y dos veces!!)-Can Pasqual-Bajada a plaza del Mortirolo-Sendero paralelo de la carretera-Can Cuiàs-Turó d'en Cors-Plaça Mireia-Can Clota-RENFE. En total 35,8 km a 14,7 km/h y 1.010 metros de desnive positivo acumulado.

Menos mal que voy con gente educada y, además -incluido Joan con sus 50 "tacos"-, están fuertes y lo aguantan todo. Y es que, claro, hoy les he "metido" todo subida hasta el Tibidabo: 12 km subiendo sin parar. Joan y Xavi comentaban que era una gran salida y que "cuando se empezaba a subir", je, je. Por cierto, gran vista. Cielo despejado que permitía ver desde el Montseny hasta las estribaciones del Puig Madrona.

Bajada rápida y fría por la carretera hasta la Arrabassada y subida por el sendero de Can Cortès hasta los "bancos verdes", tras habernos despedido de Albert y Paco Lapierre, que se fueron a casa por la carretera de les Aigües. Supongo que concurrida, ya que hoy se celebraba la Caminada Internacional de Barcelona y nos encontramos, en casi toda la ruta, personas de varios países -vimos caminantes de Dinamarca y un grupo, en Can Pasqual, con su bandera de Austria-.

Tras la subida del sendero, bajamos por la trialera de Andrés, desconocida algunos de los compañeros, bastante limpia hoy. Suele tener bastante piedra, pero, tras la "ventada" de principios de año, ya ha quedado en buenas condiciones e, incluso, nos cruzamos con varios ciclistas que la subían.

Nos fuimos al Centre d'Informació y, tras cruzar la carretera de Sant Cugat a Vallvidrera, hicimos el sendero del merendero y, para varias un poco, fuimos al Pantà por el lateral de la subida por escaleras al mismo y, después de mucho tiempo sin pasar por allí, conduje al grupo, tras pasar el puente del Pantà, hacia la subida a Mas Sauró para enlazar con la subida a Can Pasqual.

La sorpresa del día fue que, tras mucho tiempo, ¡nos encontramos a María José en la trialera de Mª José! ¡Ya era hora! Después, llegada a los containers de Can Pasqual, con tráfico...¡de bicicletas! Era impresionante, incluso en toda la ruta, la cantidad de ciclistas que había. ¡Somos masocas; nos gusta salir cuando hace más frío!

Bajamos por la carretera y, tras hacer el sendero paralelo de la carretera, hicimos el ya tradicional "sprint final" del Turó d'en Cors con Xavi, Rosendo y yo mismo de protagonistas hoy. ¡Y hoy, con peligro, con mucho peligro! Y es que, tras hacer los dos toboganes de subida tras el propio Turó, la bajada estaba "plagada" de caminantes. Tuvimos que levantar el pie, aunque algún susto nos llevamos.

El final. ¡El de siempre! Gran almuerzo, eso sí, esta vez, dentro del restaurante de Plaça Mireia. Creo que la terraza exterior ya se nos acaba. Pero, espero, las salidas, aunque haga más frío, no se acaben. ¡Es cuestión de abrigarse cuando hay "rasca"! ¡Suerte a los que hagáis la Berga-Berga! Yo, por mi parte, explicaré, el próximo miércoles, lo que nos haya acontecido en la Pedalada CEGUB. O sea, ¡la Pedalada de los funcionarios! ¿Ya habéis pedido el día de asuntos propios?